Al sur de la ciudad, entre el hambre y el desespero a causa de un gobierno insensible que olvida a los más vulnerables, se ahorcó frente a sus hijos Lady Joanna Arévalo González, conocida en el mundo artístico como «La Ratona», tenía 28 años, solía trabajar entre las calles de una ciudad que durante años ha sido abatida por la desigualdad y la falta de oportunidades.
Johanna tenía 3 hijos, la situación no dio más, las deudas y el hambre golpearon su vida hasta concluirla en un pequeño cuarto de la localidad de Bosa, al parecer en una trasmisión en Facebook contó sus últimos momentos previos a su muerte. Según una fuente de información, la dueña de una pequeña habitación donde vivía ya había amenazado con echarlos si no pagaba el alquiler, una situación que puede agobiar a cualquiera.
La historia de Johanna no es para juzgar o criticar por el hecho de dejar unos hijos desahuciados, es el claro el ejemplo de lo que la presión, la ansiedad y la depresión pueden causar en una persona. La salud mental es importante y algunos por estos tiempos la olvidamos. Necesitamos ser más empáticos, ayudar aquellas personas que se encuentran en medio de una situación critica.
Fuente de información: Las2orillas