La palabra «graffiti», es un concepto de origen italiano que se deriva del verbo latino “grabare», que significa «escribir». En términos más generales, el graffiti hace alusión al arte callejero plasmado en los muros, el cual une un conjunto de técnicas, colores y a mayor profundidad un concepto visual propio del artista o los artistas involucrados.
El graffiti no nació para los inicios de la cultura Hip Hop como algunos creen, de hecho durante el imperio romano este ya se concebía entre los muros de las calles como un modo de manifestación. Ya sea por medio de la sátira o generar una crítica, el graffiti al igual que muchas corrientes artísticas, nació a partir de la inconformidad social que existía en el entorno.

Desde entonces este movimiento artístico fue creciendo en grande. En Estados Unidos durante el auge de la cultura Hip Hop, el graffiti tomó más fuerza y comenzó a evolucionar a tal punto que ya no eran «rayones», sino la máxima expresión del sentir de un artista, representado en imágenes de gran magnitud con una variedad de colores y conceptos.
Claro que el graffiti por años se ha percibido como un acto vandálico, existen aquellas personas que se molestan por esos que pintan sobre lo que llaman «muros ajenos». De ahí parte el «graffiti ilegal», aquel que se esconde entre la clandestinidad para llenar de color el pálido concreto.
Con el tiempo, muchas ciudades al rededor del mundo han adaptado una nueva mentalidad, considerando así el graffiti como un medio para embellecer el espacio urbano. Son muchos los artistas que han ganado un alto reconocimiento a nivel nacional e internacional por sus piezas, así como también están aquellos grafiteros que entre la fría y oscura noche salen y se apoderan de los muros, en donde por horas pasan sus brochas y aerosoles.
En el proceso de pintar, muchos lo hacen de manera individual, pero suele ser común encontrar grupos que se dedican a este arte. Conversando con un grafitero de Bogotá, quién solía salir en las noches con todo su crew, nos comparte algunos de los términos empleados al momento de pintar.
Cabe aclarar que estos términos se han creado dentro de los mismos grupos, puede que en otros países el significado varíe o no se tenga concebido tal cual.
Aquí te presentamos 28 términos empleados en el graffiti, definiciones que embarca un lenguaje en común creado por los amantes de los muros:
Conspire: pedir un poco de pintura o algo
Campana: vigilar un lugar
Treparse: subir a un lugar para pintar
Tapar: pintar sobre una pintada
Montar vigilancia: seguimiento de un espacio durante horas o días hasta meses
Raquetear: esculcar un lugar o cosa
Fondear: pintar un lugar de color rápido
Aéreo: pintada en un piso alto
Cortar: limpiar un trazo que se salió del boceto
Coronar: completar pintada
Azote: lugar o momento con mucha adrenalina
Limpiar: recuperar un lugar o una pintada mal hecha
Rendir: aprovechar el mayor tiempo un mismo producto de pintura
Vacuna: pago por silencio o por guardar información
Pillar: momento fallido de una pintada
Azarar la plaza: momento de estrés inesperado
Revirar: entrometerse o ayudar un colega en una situación
Montar la espantosa: generar pánico con presión
Techos: lugar par a pintar sobre edificios casa otros
Vallas: anuncio publicitario a gran altura ideal par a pintar
Bombas: estilo de graffiti definido por letras redondas
Legales: pintada con permiso
Ilegales: pintada sin permiso
Beefs: problema con otro escritor o persona
Buffear: pintar y dañar pintadas de otros escritores
Bitear: copiar un estilo de otro escritor
Drips: pintura chorreando
Spot: lugar o espacio elegido par a pintar